M-607 DIA 6.05.2010

Comentario aparecido en el diario M 607 de Tres Cantos



TODO LO QUE NO CABE EN UNA PANCARTA DE DOS METROS

Parece ser que la Concejalía
de Deportes se propuso ya hace
tiempo poner patas arriba todo lo
conseguido durante años en el
ámbito que les ocupa. La desaparición
del Patronato de Deportes
fue también la desaparición
de la imparcialidad que como
organismo autónomo practicaba,
y fue el nacimiento del Área
de Deportes, dirigida por cargos
de confianza de los políticos gobernantes,
el principio del fin del
deporte tricantino. Su leitmotiv,
por no decir su obsesión, es la
imagen, la mano de pintura en la
fachada, aunque luego por dentro
campen goteras añejas por las
techumbres. Y todo ello mientras
se derrocha el dinero público, por
ejemplo en pegatinas o papeleras
que, después de ponerlas, no
cumplen las expectativas y hay
que retirarlas y colocar otras. Porque
claro, ¿cómo van a consultar
o a dejarse asesorar ellos, que todo
lo saben, expertos como son
en parches y promesas de un futuro
mejor?
Una de sus últimas y geniales
ideas ha sido la de privatizar
el Polideportivo Islas, después de
gastarse un dineral en tirarlo abajo
y volverlo a construir. Se aceptan
apuestas para ver qué amigo
empresario se va a hacer con el
pastel y cuánto va a costar a las
arcas municipales la broma. Los
motivos por los que los maquinistas
y oficiales de piscinas de
la Empresa Municipal de Servicios
no puedan seguir encargándose
de la instalación como hasta
ahora, no los conocemos. Lo
que sí sabemos es que estos trabajadores
no nos costaban ningún
dinero extra, por formar ya
parte de la plantilla, y que la empresa
concesionaria, lógicamente,
sí que facturará estos gastos
de personal al Ayuntamiento. A
su vez (si alguien lo entiende que
me lo explique), estos hombres
de confianza de los políticos “sugieren”
a la E.M.S. listados de amigos
y familiares, con el fin de que
se les contrate y se les forme con
cursos que niegan a muchos trabajadores
de plantilla, pisoteando
derechos y creando conflictos
y, lo más disparatado, sumando
personal a la E.M.S. pero restándole
servicios. Su intromisión
en la E.M.S. llega hasta el punto
de influir y decidir cambios y traslados
de personal de polideportivos
guiándose exclusivamente
por cuestiones personales, sin
prever o valorar los daños colaterales
que provocan con su caprichosa
manera de actuar.
Todo esto, y desde hace
unos meses, se lleva plasmando
en forma de pancartas y carteles
por los alrededores del Polideportivo
Islas y, aunque creo que
desaparecen con la máxima celeridad
sé que, por el contrario, la
acumulación de despropósitos
permanece. Y va a más.


Hebe